Comenzamos el capítulo con Mark enfrentándose por primera vez al Doctor Seismic, un personaje que siempre mostrará mucho potencial pero que a la final nunca tendrá mucho protagonismo.
Por cierto que la habilidad de Seismic me recordó a la tecnología que mucho tiempo después desarrollará Robot/Rex para enfrentarse a los viltrumitas. ¿Será de allí de donde salió?
Poco después de regreso en casa, papá Nolan intenta tener la «conversación importante» con su hijo, pero no es precisamente la conversación que Mark piensa. Pero que no se diga que Nolan no lo intentó…
En las páginas posteriores podemos ver a Nolan muy ocupado intentando suplir las deficiencias de los nuevos Guardianes del Globo.
En uno de esos momentos él y Debbie se despiden, las últimas palabras que esta pareja compartirá durante mucho tiempo. Ese diminuto momento de duda dolerá en el recuerdo de los dos…
Y justo cuando Nolan está salvando el día por enésima vez, el Inmortal reaparece:
¿Qué clase de respuesta podría darle Nolan? ¿Qué respuesta dejaría satisfecho al Inmortal? Aquí no hay ninguna explicación que valga.
Te maté a ti y a todos nuestros amigos porque…
Debbie descubre en la televisión que su esposo y el Inmortal están peleando, ¿por qué razón están combatiendo quienes antes eran compañeros de armas? ¿Por qué Nolan ha estado tan raro todos estos días? Ella sabe que hay algo que está mal.
Y Mark descubre la verdad de la peor manera posible.
Les presento a Robert Kirkman y Ryan Ottley señoras y señores con su inimitable estilo sangriento y lleno de tripas.
El padre y el hijo tienen que hablar y ¡vaya charla que será esa!
